DERRÚMBATE POR COMPLETO
Tienes que romperte por dentro, derrumbarte por completo.
Dejar que todo tu mundo se desplome y se venga abajo.
Permanece desnuda, desprotegida en el centro del dolor.
Permite que te atraviese.
Siente tu vulnerabilidad... tu miedo.
Siente tu corazón hecho pedazos por la profunda incomprensión de no saber quién eres.
Respira profundo en la quietud silenciosa de tu alma.
Así como el copo de nieve volátil y frágil deviene en el agua de los ríos…
Así como la hoja infinita y temblorosa muda de nuevo cada año…
Así te encontrarás a ti misma.
Desnuda, silenciosa espontanea.
Amaneciendo sin fin a cada momento.
Irguiéndote en medio de la nada.
Contemplando asombrado tu propia eternidad.
De entre las ruinas de tu antiguo “yo” hecho añicos, emergerá la pura verdad resplandeciente... ligera, vibrante, libre…
Y con la mirada desatada, entenderás que hasta la más pequeña mota de polvo estuvo siempre en su sitio.
Y que en lo profundo de todo el dolor que hay en el mundo, se encuentra imperturbable la semilla del Amor, la semilla de la Esperanza
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