En una noche lluviosaTú a mí me cautivaste
tu radiante sonrisa
me pareció fascinante.
Tu cabello brillante
posaba sobre tus hombros
y yo, muy galante
me enamoré de tus ojos.
De tus ojos de miel
que parecen luceros
Iluminando tu piel
como a un bello crucero.
Un crucero que embarca
una gran travesía.
pues la lluvia le toca
hasta las mejillas.
(Enamórate de quien te haga suspirar ,
y lucha por tu felicidad...)
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