Lo odiaba por no quererme, lo odiaba por irse aquella noche pero sobre todo me odiaba a mi por no saber entender, por no saber entender que no me extrañaría como yo a él, que ya no iba a buscarme como aquellas veces, que simplemente ya no sería su “niña”. Pero sobre todo que él jamás me iba a amar como yo a él… que por más que lo intentara no lo iba a lograr, y que si hubiera sido suficiente para él no habría querido irse, se habría quedado conmigo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario